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El pastor Rubén De Rus ha experimentado personalmente la promesa bíblica de que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien.
De Rus, originario de España, obtuvo una visa de estudiante y vino a EE.UU. a los 20 años para estudiar teología en una universidad bautista de San Antonio. Allí conoció a su esposa, Azucena, y, poco antes de graduarse, fue reclutado para pastorear una iglesia en Colorado.
De Rus llevaba varios años pastoreando allí cuando descubrió algo que cambiaría la trayectoria de su ministerio: alguien que le había ayudado a obtener su visa religiosa, lo hizo de forma fraudulenta, obligando a De Rus a hacer algo que no tenía previsto: volver a estudiar para poder permanecer en Estados Unidos con su visa de estudiante. De Rus decidió cursar una maestría en consejería clínica, un camino que, según él dice, quizás no habría considerado si las cosas hubieran ido según sus propios planes. Durante ese tiempo, también trabajó en un centro de salud mental.
Poco sabía él, que Dios estaba trabajando y sentando las bases para el ministerio que beneficiaría al reino de Dios varios años más tarde.
En el 2018, De Rus y su esposa comenzaron a sentir que Dios los llamaba a salir de Colorado y regresar a Texas para estar más cerca de la familia de ella. El Señor abrió la puerta para que De Rus sirviera como consejero clínico en un refugio para niñas inmigrantes en el área de Corpus Christi—un puesto que ocupó durante cinco años, el último como director del departamento de consejería.
Con el paso del tiempo, De Rus se enteró de que la Convención de los Bautistas del Sur de Texas había identificado Corpus como una zona donde se necesitaban más plantadores de iglesias hispanos. Aunque De Rus no tenía planes de regresar al pastorado, Dios puso en su corazón que él podía ayudar a satisfacer esa necesidad.
Él comenzó el proceso de evaluación de plantadores a través de Send Network SBTC, la asociación de plantación de iglesias entre la SBTC y la Junta de Misiones Norteamericanas, a finales del 2022. Fue enviado con el apoyo de su iglesia, Yorktown Baptist Church en Corpus Christi, su pastor, Jonathan Brazell, y su cuerpo de ancianos. De Rus y su familia fueron oficialmente comisionados como plantadores en la Reunión Anual de la SBTC en noviembre de 2022, y plantaron la Iglesia Bautista South Side en Corpus Christi unos meses después.
Teniendo conversaciones, alcanzando familias
South Side comenzó a celebrar estudios bíblicos los domingos en el 2023, y a De Rus y su esposa se les unió una pareja de amigos, Miguel y Daniela Barreras, deseosos de unirse a la obra que Dios estaba haciendo. De Rus se sintió específicamente llamado a poner en práctica su experiencia y formación como consejero clínico a través de la iglesia, proporcionando sanidad interior a las personas que sufrían y vivían sin Jesús. Esa misión guio la forma en que South Side empezó a alcanzar a la comunidad.
La iglesia comenzó a ofrecer una serie de talleres llamados “Hablemos” que abordaban temas como la inmigración, la paternidad y otros. Estas charlas han ayudado a la iglesia a conectar con 10 familias que asistieron no sólo a las charlas, sino a la iglesia.
“Nuestro enfoque en este momento es trabajar con la unidad familiar, y nuestra misión es hacer discípulos de Cristo que crezcan en su obediencia a Dios y amor por los demás”, dijo De Rus.
De Rus dijo que ha sido sorprendente ver con cuántas personas el Señor le ha permitido a la iglesia conectar en tan poco tiempo. South Side ha visto abrirse una serie de puertas ministeriales, permitiendo a sus miembros ministrar a familias y personas vulnerables. Una de esas oportunidades ha llegado a través de un refugio local para mujeres, donde una mujer vio un anuncio en las redes sociales promocionando una de las charlas de la iglesia. Empezó a asistir, invitó a otras mujeres y, como resultado, varias han aceptado a Cristo y se han bautizado.
“Nuestro enfoque en este momento es trabajar con la unidad familiar, y nuestra misión es hacer discípulos de Cristo que crezcan en su obediencia a Dios y amor por los demás”.
South Side—que celebró su primer aniversario el 1 de enero de 2024 con la llegada de una persona a la fe en Cristo—tiene planes para ampliar su alcance en la comunidad. Pronto, se instalará una plaza comunitaria en sus facilidades, donde la iglesia ofrecerá clases de inglés (ESL) y diploma de secundaria (GED). Además, en mayo funcionará allí un consulado mexicano móvil para que los ciudadanos mexicanos puedan resolver gestiones de documentación.
De Rus—que es un pastor bivocacional y también trabaja como subdirector en un programa de familias de acogida—dijo que su oración es que Dios siga ayudándole a administrar bien su tiempo. Dijo que es un reto ver las grandes necesidades que hay con pocos recursos para atenderlas. Aun así, el plan es ministrar fielmente a las cerca de 40 personas que asisten regularmente a South Side mientras se siguen ofreciendo charlas y talleres para fortalecer a las familias, presentarles a Jesús y ayudarles a crecer en su fe.
“Cuando decides entrar por la puerta [de Dios], es increíble ver todo lo que hay detrás de esa puerta, que son oportunidades para ministrar a la gente”, dijo De Rus. “Estamos viendo gente que viene a Cristo, familias integradas, sirviendo, y creciendo en su relación con Dios y fortaleciendo sus relaciones padre-hijo y cónyuge”.
